(Giosuè Spedicato)
Terminado el partido, los ánimos de los entrenadores no están precisamente calmados, sobre todo en el caso de Thiago Motta, quien durante la rueda de prensa no ocultó su rabia por el resultado final. No perdió la oportunidad de expresar fuertes dudas sobre el VAR de Nasca, sobre el cual no se manifestó de manera clara y directa, pero dejó perfectamente en evidencia sus dudas al respecto. Además, Thiago afirmó sin rodeos que, según él, su equipo debía haber ganado el partido y se mostró de manera bastante despectiva hacia el Lecce.
Por otro lado, el entrenador del Lecce se mostró mucho más tranquilo y satisfecho con el partido. Durante la conferencia de prensa, expresó su aprecio por sus jugadores, quienes lograron llevar el partido a un empate. También destacó los numerosos intentos de gol durante la primera mitad (aunque sin concretar). Por último, D'Aversa manifestó su satisfacción por la situación del Lecce, que aunque aún no ha logrado una victoria en casa, tiene 6 puntos más que el año pasado, lo que indica que están haciendo un buen trabajo.
Podemos decir entonces que por un lado encontramos a un Thiago Motta claramente enfadado y resentido por el resultado final del partido y por la evaluación del VAR; mientras que en el otro extremo encontramos a un Roberto D'Aversa mucho más diplomático y especialmente satisfecho tanto con el trabajo de sus jugadores como con la situación del club Lecce. Solo nos queda esperar y ver si en el próximo partido el equipo salentino logrará obtener un resultado positivo en casa.
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