(Giosuè Spedicato)
Alla conclusión del partido que enfrentó a los amarillo y rojo contra el equipo del Empoli, las dudas y perplejidades son palpables. En esta ocasión, el Lecce ha logrado solo un empate, elevando a 10 los partidos en los que los chicos no han conseguido una victoria.
Como si eso no fuera suficiente, en este último partido, el equipo salentino no ha expresado completamente su valía, a pesar de que en la primera mitad hubo muchas oportunidades de gol que no se concretaron.
Al final del partido, el entrenador d'Aversa ofreció la habitual conferencia de prensa. En ella, trató de minimizar los errores de su propio equipo, aunque admitió que en la segunda su equipo no merecía la ventaja. Además, el entrenador se pronunció sobre los diversos cambios que ambos equipos realizaron, desde el cambio de Caputo debido a su lesión hasta los cambios "preventivos" que d'Aversa hizo "para no correr el riesgo de quedarse con diez jugadores".
El partido fue sin duda marcado por el sorprendente autogol del centrocampista del Lecce, Hamza Rafia, y el al menos afortunado error del portero del Empoli, Etrit Barisha. Estos dos episodios tragicómicos causaron los respectivos goles.
En resumen, lamentablemente, nuestro amado equipo giallorosso no ha mostrado su verdadero potencial en este partido, sin contar los 10 turnos en los que el club no ha logrado un resultado completo. Pero ya se sabe: ¡se ama al Lecce en la alegría y en el dolor!
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